Sólo contigo (Capítulo 12)

Yey!!! bueeeno... cap 12!!!! xD ahahahah
ia la próxima semana estará el cap
ke todos esperamos xD (** no me canso de leerlo **)
xD hahahahaha xD
ta muy bueno... espero no aburrirlos
^^
y por la duda que surgió anteriormente ^^
la espiga lo utilicé como término a la pieza de plástico
o metal que utilizan los guitarristas para tocar
;)

..................................................................................


12.- Coincidencia

Después de mucho trabajo los dos tuvieron un merecido descanso. Un día en el que Maya y Aiji salieron juntos a comer, vieron un cartel promocional de su disco, lo que generó mucha emoción a ambos y se sacaron fotos junto a éste y continuaron con su paseo.

Finalmente el día en que su disco salía a la venta llegó, ambos estaban en Pony Canyon haciendo nuevas canciones y Hirotaka entró al estudio.

Hirotaka: Bien…, muy bien, para ser el primer día, y sus primeros singles, las ventas han comenzado muy bien.
Maya: ¡¿Enserio?! –preguntó emocionado-
Hirotaka: ¡Sí!, y ya conseguimos que den una presentación de los singles en la televisión y radio.
Maya: ¡Yey! ¡Qué emoción! –Dijo tomando las manos de Aiji y dando ligeros saltos-
Aiji: ¡Wow!, sí que es un buen comienzo
Hirotaka: Bueno, en fin, aquí les dejo una hoja con todas las fechas de sus presentaciones, cuídenla mucho porque esta será su agenda.

Cada uno tomó una hoja y comenzaron a leer.

Aiji: ¡¿QUE?! ¿la primera presentación es este 10 de octubre?
Hirotaka: Sí, ¿por qué la expresión?

Maya y Aiji intercambiaron una mirada rápida para así regresarla a las hojas que tenían en las manos.

Maya: no…, nada –Dijo en un tono apagado- ¡Estamos felices de que sea tan pronto! –Dijo para tratar de arreglar la decaída de ánimo que hubo en ese momento-
Aiji: ¡Sí! –Exclamó un poco forzado-
Hirotaka: mm… -Exclamó dudando- entonces, me retiro. Hay mucho papeleo estos días, nos vemos –Dijo para salir del estudio-.

Ambos esperaron a que Hirotaka se alejara un poco más.

Aiji: Buh… -suspiró- ese día íbamos a festejar nuestros 2 meses –Dijo muy desanimado-
Maya: Sí…pero, podemos festejarlo en la noche ¿no? –Comentó para tratar de dar una solución al asunto-
Aiji: Sí, creo que no queda de otra –Dijo de mala gana-
Maya: hum –Exclamó un poco incómodo a las contestaciones de Aiji- ¿Y qué haremos?
Aiji: ¿Quieres ir a cenar? –Dijo con un tono más comprensivo-
Maya: ¡Sí!, ¡me parece buena idea!, ¡vayamos a comer tepanyaki!
Aiji: Haha… ok, sé de un lugar donde preparan un tepanyaki delicioso –Dijo tranquilamente-
Maya: ¡Yey! Me parece, entonces saliendo del show vamos ¿sí?
Aiji: Sí –Dijo empezando a tocar su guitarra-

Maya se había sentido un tanto incómodo, sabía que Aiji se había molestado pero aún así Maya veía a Aiji con mucha atención. Cada vez que Aiji tocaba la guitarra para practicar o grabar, Aiji se concentraba mucho y disfrutaba cada nota que tocaba.

Maya se encontraba sentado con el respaldo de la silla frente a él y comenzó a dar de vueltas en ésta.

Maya: Aiji, apúrate con eso, yo también quiero grabar –Dijo mientras seguía girando-
Aiji: ya voy, ya voy… es que, esta parte no me gusta como suena, escucha

Aiji tocó dicha parte y los dos se quedaron en silencio pensando.

Maya: a ver, préstame tantito la guitarra –Dijo levantándose y tomando el lugar de Aiji-

Aiji tenía curiosidad de escuchar lo que Maya iba a hacer, así que se quedó parado junto a él. Maya tocó lo mismo que Aiji, volvió a repetirlo aproximadamente 4 veces, maya se quedó en silencio escuchando sus pensamientos y volvió a tocar pero esta vez modificando ciertas notas, las anotó en una hoja aparte y volvió a tocar, después de 5 minutos Maya tocó la pieza completa.

Aiji: ¡Wow!… -Dijo asombrado- no se me hubiera ocurrido hacer eso.
Maya: Haha… pues, no sé… se me ocurrió ahorita
Aiji: pues… con eso ya estaría terminada la composición de la primera parte, ya luego terminaré o demás –Dijo acostándose en un sillón que estaba dentro del estudio-
Maya: ¡Eh!... entonces haré unas pequeñas pruebas con la parte que tienes –Dijo muy emocionado-

Maya cantó un poco con la corta grabación que tenía y practicó por una hora seguida. Aiji se había quedado dormido en el sillón. Maya volteaba a verlo a cada rato. Aunque ya había dormido con él muchas veces nunca había tenido la oportunidad de verlo dormir, ya que Maya era siempre el que quedaba dormido primero. Maya se levantó y se puso junto a Aiji, se hincó en el suelo y recargó sus codos en la esquina del sillón y así lo miró por unos momentos. En su mente sólo estaba Aiji, Maya no dejaba de recordar todo lo que había pasado con Aiji, desde que se conocieron, su caída en el cuarto de ensayos y su primer beso, la primera vez que vio llorar a Aiji, sus declaraciones en su primera presentación, el primer “te amo”; en verdad era muy feliz con Aiji a su lado.

Aiji: ¿por qué tienes esa cara? –Preguntó mirando a Maya a la cara-
Maya: ¡EHH!, ¡¿Cuándo despertaste?! –preguntó muy sobresaltado-
Aiji: cuando tomaste mi mano –Dijo mientras volteaba a ver su mano-

Maya miró al mismo lugar a que Aiji dirigía su mirada, era cierto, mientras Maya recordaba todo, inconscientemente había tomado su mano.

Maya: ¡Oh! Perdona –Dijo soltando su mano-
Aiji: Haha, ¿Cuánto tiempo llevabas viéndome? –Preguntó mientras volvió a recostarse en el sillón y dirigió su mirada al techo para llevar sus manos a su nuca y recostarse en éstas-.
Maya: Hum… no lo sé… -Dijo apenado-
Aiji: ya veo.

Ambos se quedaron en silencio un momento, Maya se sentó en el suelo y recargó sus manos en éste.
Maya: ¡AHH! –Gritó de repente Maya-.
Aiji: ¡¿Qué pasó?! –Dijo levantándose de golpe del sillón-
Maya: aff –Exclamó levantando su dedo índice el cual estaba sangrando-

Ambos miraron a donde Maya se había recargado y, en el lugar había una tachuela con la punta manchada de sangre. Maya llevó su dedo índice a su boca y la lamió para evitar que siguiera sangrando.

Aiji: Hay Maya… sabía que tarde o temprano lo usaría contigo –Dijo sacando su cartera-

Aiji abrió su cartera y sacó una bandita con estampado de conejitos.

Maya: ¡WAH! ¡Qué linda está la bandita! –Dijo con un tono muy infantil-
Aiji: Haha, sabía que te iba a gustar. Permíteme tu mano. –Dijo extendiendo su mano para recibir la de Maya-

Maya le dio su mano a Aiji, Aiji tomó el dedo de Maya, lo llevó a sus labios y le dio un pequeño beso.

Aiji: Para que cure más rápido –Dijo mientras se escapaba una sonrisa de su rostro-

Maya se sonrojó y desvió su mirada a su mano herida, Aiji continuó poniendo la bandita con mucho cuidado.

Aiji: listo –Dijo levantándose-
Maya: ¡Gracias Aiji-senpai! –Dijo abrazando a Aiji-
Aiji: No es nada
Maya: ¡Ah!, ¡Ya sé! –Dijo metiendo su mano a la bolsa de su chamarra-. En recompensa te daré esto…

Maya sacó una espiga de su bolsa y la mostró a Aiji

Maya: Ésta es mi espiga más querida, la usé sólo en conciertos importantes y siempre la traigo conmigo, tiene muchos recuerdos míos, cuídala bien ¿Sí?

Aiji se quedó sorprendido por el regalo

Aiji: no es para tanto… puedes conservarlo –Dijo en un tono amable-
Maya: ¡No, Aiji ¡Acéptalo por favor!
Aiji: Pero… -Dijo mientras Maya lo veía con mucha ternura-. ¿Estás seguro?
Maya: Definitivamente –Dijo sonriendo-
Aiji: Bueno… entonces la cuidaré muy bien –Dijo tomando la espiga-

Maya se acercó a la mejilla de Aiji y le dio un suave beso.

Maya: Te quiero, ¡Gracias!

Aiji guardó la espiga en su cartera y guardó ésta en la bolsa trasera de su pantalón.

Aiji: Bueno, perdona Maya pero debo retirarme.
Maya: ¡Oh!, déjame acompañarte hasta la estación –Dijo un poco sonrojado-
Aiji: No, no te preocupes, sigue ensayando… puedo irme sólo
Maya: pero… -Dijo apretando sus labios a modo de berrinche-. ¿Qué tal si alguien quiere hacerte algo malo en el camino?
Aiji: Haha, sabemos que eso no pasará, es más factible que alguien quiera hacerte daño a ti

Hubo un pequeño silencio después de ese comentario, la expresión en el rostro de Maya cambió, su ánimo, al igual que su expresión se apagaron en cuestión de segundos, así Maya desvió su mirada al suelo. Aiji pudo percatarse de esto de inmediato.

Aiji: Está bien… ya… vámonos.
Maya: ¡Yey! –Dijo incorporándose-

Nuevamente Maya ocultó muy bien los sentimientos que comenzaron a surgir en ese momento. Ambos tomaron sus cosas y salieron del estudio.

Aiji: ¡Ah!, Maya, espera. –Dijo a mitad del pasillo mientras buscaba en la bolsa del estuche de su guitarra-, Olvidé mi cabe de la guitarra, espérame aquí.

Aiji regresó rápidamente al estudio y tomó su cable, mientras lo guardaba en su bolsa un sonido extraño captó la atención de Aiji, Aiji detuvo todos sus movimientos para identificar de dónde venía el sonido, se acercó a la mezcladora y vio el celular de Maya a un lado. El celular estaba vibrando, Aiji lo tomó y vio la pantalla, era una llamada la que estaba recibiendo.

Aiji: ¿Eh?, ¿Miyavi?, ¿Por qué está llamándole? –Se preguntaba en sus pensamientos-

Aiji no se movió, se quedó observando la pantalla del celular. Por fin éste dejo de vibrar y, sin pensarlo, Aiji borró el aviso de la llamada perdida.

Maya: ¿Aiji?, ¿por qué tardas tanto? –Dijo Maya mientras abría la puerta del estudio-
Aiji: ¡Ah!… este… -las palabras no podían salir de su boca debido al nerviosismo que Aiji sintió en ese momento-.
Maya: ¡Oh!, es mi celular, ¿se me olvidó? –Preguntó mientras señalaba hacia su celular-
Aiji: mm… sí, toma –Dijo estirando su mano para entregárselo-
Maya: ¿Qué tienes Aiji? –Preguntó debido a la expresión de Aiji-
Aiji: Nada, nada, vámonos que ya es tarde –Dijo muy seriamente-

Ambos salieron del lugar y en la estación se separaron para ir a su casa, como era de costumbre. Durante los siguientes días Maya fue a casa de Aiji para seguir practicando las canciones de sus singles para la presentación del 10 de octubre, se concentraron tanto en su presentación que no dedicaron tiempo a su relación, sólo se dedicaban a ensayar.

Así el 10 de octubre llegó y los dos se levantaron temprano para arreglarse, Maya se adelantó a casa de Aiji para ayudarle a llevar sus cosas a la presentación.

Maya: Aiji, ¿dónde dejaste tu pedalera?
Aiji: debe estar junto al amplificador.
Maya: ¡Oh!, aquí está
Aiji: ¿Sí la encontraste?
Maya: ¡Sí!
Aiji: ¡Corre Maya!, se nos va a hacer tarde.
Maya: Sí, ya voy –Tomó la pedalera y bajó corriendo-
Aiji: ¡Vámonos!

Ambos fueron lo más rápido que pudieron a la presentación y entraron al establecimiento.

Maya: ¡AHH! –Exclamó mientras respiraba con dificultad-
Aiji: Haha, llegamos… a… tiempo… -Habló mientras trataba de recuperar el aliento-
Señor: ¡CON PERMISO! –Dijo un señor que corría hacia donde estaban ellos-

Maya y Aiji se apartaron del camino y el señor pasó entre ellos a una velocidad increíble para detenerse frente a una puerta que estaba a unos cuantos pasos de donde ellos se encontraban.

Señor: Disculpe –Dijo golpeando con su mano derecha la puerta-. Aquí está lo que pidió, joven.
Voz: ¡Llega tarde! –Dijo en un tono molesto-
Maya: ¡¿EH?! –Exclamó sorprendido-
Aiji: mm… ¿Qué pasa? –Preguntó mientras volteaba a ver el rostro de Maya-

El rostro de Maya estaba totalmente pálido, su mirada se encontraba totalmente fija sobre la puerta en la que se había detenido el señor, en ésta podía verse un gran nerviosismo. La puerta se abrió y una mano salió de ésta, era imposible para Maya el no reconocer esta mano. Cuando Maya se dio cuenta de quién era el que se encontraba dentro de la habitación su cuerpo se paralizó al momento, quería salir corriendo pero sus piernas no reaccionaban.

Señor: Disculpe, joven Miyavi, no volverá a pasar –Dijo haciendo una pequeña reverencia frente a él-
Miyavi: eso espero –dijo saliendo al pasillo-